Compañeros:
El Día internacional de los Trabajadores, el Primero de Mayo, es la fiesta del Movimiento Obrero Mundial.
Desde su establecimiento en todos los países por acuerdo del Congreso Obrero Socialista celebrado en París en 1889 es una jornada de fiesta Combativa y de homenaje a los Mártires de Chicago, los cuales en represalia por la lucha digna por conseguir una jornada justa de trabajo, fueron acallados por el sistema capitalista, opresor de sus derechos. Esta fecha es recordada por todxs aquellxs que vivimos del trabajo asalariado, y que sin importar el papel que jugamos dentro de la comunidad somos consientes de no ser una simple mercancía representada en nuestra fuerza de trabajo y por ende, lxs que luchamos por un mundo digno y justo, el cual se dibuje con los colores de la revolución.
En Colombia al igual que en la mayoría de los países del mundo la fiesta de los trabajadores convoca al gremio trabajador a la protesta para reivindicar sus derechos. Esta fiesta ha intentado ser opacada por las distintas políticas de estado, que atienden a los intereses de los patrones quienes no están de acuerdo con la jornada laboral de 8 horas, y por ello han buscado mecanismos “legales” para que la jornada laboral sea aún más larga y en ese sentido más productiva para sus intereses. Estas políticas están plasmadas ley 100, en la cual el pago de horas extras se inicia hasta después de las diez (10) de la noche; y el trabajador es obligado a que ingrese a una cooperativa de trabajo asociado (CTA), y de esta forma evadir el pago (por parte del patrón) de los aportes a la salud, pensiones y cesantías.
El país necesita una reforma laboral urgente, porque la que está vigente desconoce el derecho al trabajo digno y decente. Dicha reforma debe ser de fondo, y además, tiene que reconocer los derechos instituidos a nivel universal.
Así vistas las cosas, el día internacional del trabajador es un legado que no debe desaparecer, es un día en el que nos reunimos, estudiantes, profesores, campesinos, indígenas, y obreros, para hacer de esta fiesta, una lucha digna, que demuestre que la rebeldía, alegría y la organización son fundamentales para alcanzar la necesaria insurrección de todxs nosotrxs.
Por todo esto y lo que no cabe en este pedazo de papel, queremos que nos acompañes en esta digna rabia, la cual no solo converge en estas fechas, sino que se constituya en una lucha, las 24 horas del resto de nuestras vidas.
Si nosotros rompemos los bancos es porque hemos reconocido al dinero
Como causa central de todas nuestras desgracias.
Si rompemos los escaparates no es porque la vida sea cara sino porque
La mercancía nos impide vivir a cualquier precio.
Si rompemos las máquinas no es porque queramos defender el empleo
Sino atacar la esclavitud.
Si nosotros atacamos a la jodida policía no es para hacerla salir
De los barrios sino para hacerla salir de nuestra vida.
El espectáculo ha querido vernos temibles,
Nosotros sabemos que somos peores.
El Día internacional de los Trabajadores, el Primero de Mayo, es la fiesta del Movimiento Obrero Mundial.
Desde su establecimiento en todos los países por acuerdo del Congreso Obrero Socialista celebrado en París en 1889 es una jornada de fiesta Combativa y de homenaje a los Mártires de Chicago, los cuales en represalia por la lucha digna por conseguir una jornada justa de trabajo, fueron acallados por el sistema capitalista, opresor de sus derechos. Esta fecha es recordada por todxs aquellxs que vivimos del trabajo asalariado, y que sin importar el papel que jugamos dentro de la comunidad somos consientes de no ser una simple mercancía representada en nuestra fuerza de trabajo y por ende, lxs que luchamos por un mundo digno y justo, el cual se dibuje con los colores de la revolución.
En Colombia al igual que en la mayoría de los países del mundo la fiesta de los trabajadores convoca al gremio trabajador a la protesta para reivindicar sus derechos. Esta fiesta ha intentado ser opacada por las distintas políticas de estado, que atienden a los intereses de los patrones quienes no están de acuerdo con la jornada laboral de 8 horas, y por ello han buscado mecanismos “legales” para que la jornada laboral sea aún más larga y en ese sentido más productiva para sus intereses. Estas políticas están plasmadas ley 100, en la cual el pago de horas extras se inicia hasta después de las diez (10) de la noche; y el trabajador es obligado a que ingrese a una cooperativa de trabajo asociado (CTA), y de esta forma evadir el pago (por parte del patrón) de los aportes a la salud, pensiones y cesantías.
El país necesita una reforma laboral urgente, porque la que está vigente desconoce el derecho al trabajo digno y decente. Dicha reforma debe ser de fondo, y además, tiene que reconocer los derechos instituidos a nivel universal.
Así vistas las cosas, el día internacional del trabajador es un legado que no debe desaparecer, es un día en el que nos reunimos, estudiantes, profesores, campesinos, indígenas, y obreros, para hacer de esta fiesta, una lucha digna, que demuestre que la rebeldía, alegría y la organización son fundamentales para alcanzar la necesaria insurrección de todxs nosotrxs.
Por todo esto y lo que no cabe en este pedazo de papel, queremos que nos acompañes en esta digna rabia, la cual no solo converge en estas fechas, sino que se constituya en una lucha, las 24 horas del resto de nuestras vidas.
Si nosotros rompemos los bancos es porque hemos reconocido al dinero
Como causa central de todas nuestras desgracias.
Si rompemos los escaparates no es porque la vida sea cara sino porque
La mercancía nos impide vivir a cualquier precio.
Si rompemos las máquinas no es porque queramos defender el empleo
Sino atacar la esclavitud.
Si nosotros atacamos a la jodida policía no es para hacerla salir
De los barrios sino para hacerla salir de nuestra vida.
El espectáculo ha querido vernos temibles,
Nosotros sabemos que somos peores.
1 de mayo de 2010
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